Te quería componer… una sinfonía inacabada, con mis versos:
Redonda… como luna, que dormitando, acune los sueños de la noche
Una nota blanca para… las nubes de algodón, que penden desde el cielo en forma de plegaria
En negra… los destinos cruzados y sentimientos tristes de las despedidas
Una corchea… como brindis escanciado de copas llenas, diciendo sonrisas de amor eterno
Una fusa… enredada… atando corazones, mirando despertares, ansiando melodías
La clave de sol, brillando en luces blancas, de bellos pensamientos y vivencias amables
Y al final… una suave nota en do menor, que nunca marque un réquiem
y diga…
una canción.