La Perla de la Unión. Un Simbolismo Universal.

La Perla de la Unión. Un Simbolismo Universal.
La "PERLA DE LA UNIÓN". Si todos aunáramos Creencia, en un Ser Único, sabiéndonos parte de Él mismo, la vida cambiaría.

sábado, 26 de diciembre de 2020

YA CAMNO DESPACIO

 




Ya camino despacio porque aprendí a mirar la vida bajo el prisma de la quietud.

Ya no siento prisa por alcanzar esa u otra meta..., y es que casi todas mis metas han llegado de una u otra manera:

Unas las recogí por esperadas y otras bajaron, silenciosas, como si no fueran más que avisos de esa Inmensidad, al dejar atrás etapas de la vida.

Porque muchas veces, los humanos, trazamos nuestras experiencias físicas  y esas no son las que nos convienen para nuestro trazado existencial. Por ello, damos vueltas y más vueltas sobre lo que deseamos alcanzar y por nuestro bien, se resiste.

Porque nuestra Alma, bien conoce sus metas...

 

Alguna vez el chorro de la Fuente, mana, poderoso, regio, y en nuestra ignorancia lo dejamos correr y bebemos desde el charco embarrado.

La vida tiene Fuentes de agua clara y de Amor... como también tiene odios y sucesos sombríos; pero aún así, la vida es un regalo y la estancia en nuestro plano físico es una experiencia única para los sentidos y para nuestra propia evolución.

 Cuando pasamos por periodos de tremenda lucha espiritual, de dudas, de sucesos tristes, de desgastes de convivencias, de ausencias... hemos de transitarlos con la Fe y la Esperanza de saber que somos Seres regios de la Infinitud, caminando a tientas, para experimentar y adquirir las variadas vivencias que nos presta la Existencia. Pero aún con sus trabas, vivir es una gran Experiencia. ¡Bebámosla en tragos cortos, saboreando cada aprendizaje y experiencia!

Y así, creceremos caminando firmes hacia nuestro regreso, hacia nuestro Hogar, nuestra Casa.

 

Celia Álvarez Fresno 25-12-2020 Celia

viernes, 25 de diciembre de 2020

EN LA CATEDRAL

 









Esta mañana estuve de visita en la Catedral de Oviedo.

 

Tal día como hoy, hace 31 años, sonó con gran fuerza el despertador de mi Alma.

Antes de ese día, -aunque amante de Dios-, no tenía esa Roca firme a la que agarrarme, porque mi mente se afanaba en mandarme ladera abajo, diciendo que no existía nada tras la vivencia física.

 

Pero, ese día, ese gran día, en mi interior sonó el despertador espiritual y comencé a escribir con letra diferente, textos de Amor y Vida, con una gran Energía que venía de no sé dónde -hoy sí lo sé-, y que me envolvía con un intenso Amor.

 

Sí. Hoy visité al Salvador, como tantas otras veces fui, desde aquel día; pero en estos aniversarios me presento ante Él, con una letanía de preguntas que siempre son respondidas... uno u otro día:

 

Me inspira desde la Unidad de todos los seres humanos en Uno solo.

Me inspira que siembre Recuerdo, y así lo siento he de hacer.

Me inspira que las diversas lecciones sobre su Realidad han de ser Una sola: “El Amor”.

 

Me siento allí, tan cerca de sus pies, que con solo sentirle, mi Alma se arrebuja y se enhebra con Él para contarle penas y sufrimientos de tantos desdichados que ahogados por la vida, no respiran.

 

Y le cuento leyendas, para que la vida sea enternecida desde su poder y gloria, mientras...

“Deja que la vida siga su curso”, parece que me dice.

 

Y yo... entonces no digo más que “Amén” y me caen los lagrimones en el suelo, y extiendo mis manos hacia sus pies en un intento vano, pues es prohibido tocar su estatua que aunque inanimada, yo le veo saliendo de esa escultura, y la miro a mi lado, como Esencia infinita...

Y le digo despacio:

“Gracias, Señor, por ser la Columna y el Corazón de la Vida”.

Y Él... no dice nada, pero yo sé que sus abrazos nos cubren a todos por igual, y su Amor se expande como Perla de Vida, aunque viva en silencio, para que la humanidad, siga su propio camino, alguna vez a oscuras y otras veces mirando hacia esa Luz, que jamás abandona.

 

Celia Álvarez Fresno. 23-12-2020

 


martes, 22 de diciembre de 2020

CUANDO IBA CAMINO ARRIBA...

 

Y en aquel tiempo, cuando iba camino arriba, me encontré una multitud que caminaba despacio, en otra dirección. Seguía camino hacia una Estrella, que alguien vio, vibrando en aquel monte. 

Cogí mi rumbo, buscando su Presencia, aquella que me fue mostrada en una visión, un día de cualquier mes... y aquel recuerdo lo apreté en mi pecho para que brillara con el calor de la Esperanza en encontrarlo.

 Creí en Él y en mí.

Y al creer, la Tierra vibró dos veces y los tambores comenzaron a sonar,  diciendo en sus conciertos que Alguien existía aquí y también más allá de las nubes.

Soñé, mientras meditaba en la plenitud, pensando en un Mundo nuevo:

“Se arremolinó el viento... y la tormenta, antes suave brisa, se interpretó huracán para así, barrer el mal del Mundo”.

 Me encontré en el silencio, a un Caminante con  pies morados por el camino duro y angosto. Miraba con ojos de poder y Alma bella diciendo palabras  de Amor y Eternidad.

 La Oración Divina, vino rauda.  Pero las interpretaciones de una misma Realidad, corrieron  monte arriba, monte abajo, diciendo  plegarias o desmintiendo las mismas, y así, los humanos tuvieran la ocasión de mirar los sonidos como tambor o gaita, o tal vez flauta travesera, según la percepción de cada cual.

 Y la vida cantaba y los sueños soñaron y las vivencias, hoy u otro día, eran testigos  de la certera verdad, que acompaña el Núcleo de las Almas despiertas.

 Y las Almas dormidas seguirán afirmando que nada existe tras la ventana de la muerte física, y que la Vida es solo este presente, y quien se muere, se marcha para nunca más volver.

 Pero el Cielo sigue su curso y llueve Amor y Vida afirmando permanencia infinita del Alma- Ser, por y para siempre.

 Y mi Ser, me dice “Ser humano: Fuiste, eres y serás, por siempre, porque quien Es, jamás dejará de Ser”

 Celia Álvarez Fresno 22-12-2020.




domingo, 20 de diciembre de 2020

LAS SIEMBRAS

 


Dos labradores se afianzaban en sus siembras: Uno de ellos, al ver volar las aves, cubrió sus cosechas con tierra, ocultándolos de su presa.

El otro, absorto en la siembra, no reparó en las aves.

Al final de su riego, descubrió que todo estaba perdido al mirar el riego de su siembra plagado de aves.

 

Entonces, sentados los labradores, entonaron cada uno su lección:

El primero, absorto en cielo y tierra, profirió una sonora carcajada diciendo que su fruto estaba protegido, mientras el segundo sembrador, con lágrimas en los ojos, dijo:

“Yo, al estar presente en mi siembra no fui consciente de quien se abalanzaba en lo sembrado, por ello, reniego de mí mismo ya que no puedo llegar a mi hogar con las manos vacías, por mí desdén”

 

Y aquel que había protegido las semillas, sentado en el tronco caído, pensó:

“Tengo alimento para el mañana, tengo sentimientos alegres por haber conservado mi siembra, tengo regocijo ante mí por haber estado alerta, pero aún así, poseo la incertidumbre sobre si la lluvia arrasará la tierra, o que las aves corran raudas hacia mí fruto, una vez nacido”

 

Y ante las elucubraciones, el Cielo, mostrando su presencia, se interpretó caricia y dijo:

 

“No importa el motivo y sí importa que uno de vosotros, no tiene esperanza en ver brotar su fruto, ya que ha sido pasto de las aves.

 

Otro de vosotros estará esperanzado y el día en que nazcan los brotes, se afanará en regarlas y más tarde surgirán los frutos y se esperanzará en conservarlos y si un día, un ciclón lo arrasa todo, no le quedará la desolación por no haber participado en que la semilla se hiciera fruto”

 

Es por ello que mientras vivas encarnado como ser humano has de tener claras estas premisas:

 

-“Mantente alerta y verás caminos”

-“Mantente alerta y varas las aves en el cielo, pendientes de ese fruto”

Celia Álvarez Fresno 20-12-2020.

sábado, 19 de diciembre de 2020

LA FUENTE

 




El tiempo, es una medida que desaparece cuando desaparece las medidas físicas de la vida.


Los términos existenciales para aquel que vive en el plano físico, resultan difíciles de asumir, por ello, el Alma canta lecciones de Amor, y se interpreta caricia.

El Alma canta lecciones de tristeza y se interpreta dolor de corazón.
El Alma enturbia con su ruido, desde el sueño, y se interpreta dureza.
El Alma se interpreta ave que entona melodías y alegra el Amor.

El Alma, Querubín angelical o dardo perdido tras el suceso cruel.

El Alma intensifica plegarias cuando truena el Cielo y a la vez, se aquieta en el silencio, cuando todo es calmo, con el fin de encontrar su lugar.

El Alma, disparadero de Amor cuando el pensamiento y el sentimiento se unen a su causa.

El Alma, creador de odio cuando el pensamiento ve adversarios y oscuridad.

Porque el Alma se enhebra a la Mente, tantas veces... y a la vez el Alma se enhebra al Espíritu inalterable, ser de Luz, tantas otras...

Jamás existe un Espíritu perdido pues Él Es.
Jamás existe un Alma inalterable, porque el Alma espiritual siempre está influida  por la razón, que se involucra o no, tanto en logros como en fracasos.

El logro es el Amor.
El fracaso es su ausencia.

Sin Amor, reina la deriva.
Con Amor, la hacienda de las experiencias físicas, siempre dará bellos frutos.

El Espíritu es agua y es Fuente.
El Alma es agua que manó la Fuente.

Celia Álvarez Fresno 19-12-2020


miércoles, 16 de diciembre de 2020

LA MUERTE, SIN TEMOR

 





La Muerte, nuestra Realidad conocida.

 

La única verdad palpable de la que tenemos certeza, y a la que deseamos obviar desde el mismo momento en  que comenzamos el camino de nuestra vida, que no es otro, que comenzar el camino hacia nuestro adiós.

 

La Muerte se trata de ocultar, de ignorar, y nos pensamos accionistas eternos de la Tierra, haciendo tantas cosas y acumulando tanto… creyendo que todo va a permanecer y nosotros, desde luego, también, en el terruño que venimos a ocupar.

 

Realmente somos “okupas” de este lugar en donde vamos a cosechar experiencias.

 

Nacemos un día, en un lugar elegido. Sí, elegido, como corresponde a la experiencia física que necesitemos para avanzar.

 

Creo que venimos con un libro de instrucciones, y que en muchas ocasiones, nos olvidamos de leerlo; ves unos carriles, y tienes pila para caminar.

 

Hay pilas que duran más y otras menos. Unas son más bonitas, por el colorido, y otras casi pasan desapercibidas por quien las usa.

 

Casi siempre nos olvidamos de leer el libro de instrucciones que llevamos en nuestro interior, a modo de intuición, y nosotros comenzamos a labrar esto por aquí… eso por allá.

 

Hacemos la zancadilla a aquél que avistamos de lejos, y corremos a su alcance, cambiando de vía, y derribándolo, no sea que nos adelante.

 

Pero, no contentos con eso, también en el lote y después de haberle hecho añicos, queremos quedarnos con el carril por el que transitaba.

 

Y avanzamos, sin darnos apenas cuenta de lo que estamos haciendo, y por supuesto en ningún momento reparamos en mirarnos para intentar recoger a quien ha quedado atropellado por nosotros.

 

Y el libro de instrucciones ya quedó en el olvido, y como sustituto, vamos imaginando el libro de la puñetería, de los acosos, de las zancadillas, de los triunfos… creyendo que nuestra vida en la tierra va a ser infinita.

 

Hay muchas vías, y el que se queda atrás porque el otro le ha derribado, se pudre en la ladera, en donde nadie va a reparar en él, ya que estamos mucho más entretenidos mirando ese futuro, que realmente va a ser nuestra trampa.

 

Un día, llegamos a la última estación y nos encontramos con el final del viaje. Lamentos y más lamentos… Pero ¿y esto? piensan y pensamos. ¿Qué ha ocurrido?

 

Entonces llegamos a donde teníamos que tener en cuenta, íbamos a llegar y Alguien nos recibe.

 

-¿Has leído el libro de instrucciones?

 

-¿Qué libro?

 

-Aquél que Yo te regalé para que supieras caminar por la vida.

 

-¡Ah! No. ¿De que libro me hablas?

 

-Del que llevabas impreso en el corazón.

 

-No. Yo sólo atendía al jefe de las vías, yo,que me decía por donde tenía que ir.

 

-¿A cuántos has derribado mientras caminabas?

 

-A nadie, Jefe. A nadie.

 

-Yo te he visto dejar tirada a mucha gente, y abusar de tantos y tantos, y comenzar las luchas por llegar el primero, y has hecho que otros muchos se doblegaran ante ti. Yo te he visto que has arrollado en tu carrera y no miraste siquiera los despojos que has dejado.

 

-Es que yo creía que tenía que ser así.

 

-Eres libre. Has actuado desde tu libertad. Pero desde esa libertad, hoy, eliges tu regreso al plano físico, y has de recordar perdonar a quien te arrolle, porque antes, ya lo has arrollado tú. Y al perdonarle a él, te perdonas a ti.

Y tus pasos avanzan hacia la evolución, al reencuentro con el Bello Ser, desde tu Alma elevada y luminosa.

 

Así se teje la evolución.

Celia Álvarez Fresno. 2018.

 

Celia

martes, 15 de diciembre de 2020

UNA MIGRANTE








 Solía mirar desde la ventana de mi habitación, esperando que pasara aquella mujer casi diminuta, que arrullaba con su paso, lleno de ternura.

Yo le decía “buenas noches”, mientras ella llevaba cogido de su pecho, un pequeño fardo, en donde se vislumbraba una carita morena.
Y ella me decía “buenas noches, nena”, y yo, quería que aquel bracito corto, que era mío, pudiera alargarse mucho… mucho, hasta alcanzar a aquella pobre mujer, de rostro triste. Y acariciar su cara.

Pero mi intento fallido, terminaba siempre en un intento. Nada más

-¿Quién es esa mujer que pasa por nuestro camino?

-Una migrante, hija. Una migrante.
-Y ¿Qué es ser una migrante?
-Migrante son personas que vienen de otros lugares en busca de mejor modo de vida.
-¡Ah! ¿Y ya ha encontrado eso que busca?
-Es difícil, hija. Tal vez lo consiga o tal vez no. El tiempo lo dirá.

Pasaron los años, y no olvidé nunca aquella escena de antaño en dónde yo sufría por las carencias ajenas.

Pero el tiempo avanza y nuestro corazón endurece, tal vez como medio de defensa para no sufrir. O quizás esté escrito en los genes de los que vivimos que la dureza se vaya apropiando de los sentimientos, y ya, las lágrimas dejen de brotar ante las terribles tragedias que cubren las vivencias.
Sólo sé que mi deseo de poseer un largo brazo, se vio cumplido con el paso de los años.
Pero… ¿Qué ha pasado? Ya no encuentro a ninguna pobre mujer que pulule en las mismas circunstancias de ayer…O… ¿Será que no la veo?

Sí. Tal vez sea un medio de defensa para no sufrir.

La vida nos endurece para sobrevivir. Sí, eso es
15-12-2018

CÁNTARO DE LUZ

 


Caminante del Cielo, hoy en la Tierra. Lazo de unión, que alumbra el creador. Cántaro de Luz, con savia propia. Pedestal olvidado, al transitar la Tierra.

Asidero de vidas que establecieron pacto de vivencia absoluta.

Canciones entonadas, con brillo eterno. Fuente de Verdad, de Amor y Vida.

Suceso comenzado, regresando a la vida, con sonidos de Amor.

Crisantemo florido en pos de la Verdad. Entusiasmo y gozo, al despertar primero. Zozobra y pena al temer el suceso y derivar en caos, lo establecido.

 

Alma afanada, en llevar el canto del corazón.

 

Perpetua agonía en los comienzos con derivas y fracasos, mirando letras bellas, situando unos... ¿Por qué?

 

Mujer de luto al alcanzar recuerdos de Consciencia y dejar atrás condicionantes del ayer.

 

Alegría y capitulación ante el hallazgo, trazó tu ruta nueva.

¡Despertar al Amor! Que yacido entre las Luces apagadas, voló con canto nuevo.

 

Regocijo de Vida y creencia de Muerte inacabada al encontrar la Luz Eterna.

Ausencia de tristeza al conectar Contigo en tu Esencia inmortal.

 

Canto hacia las flores y las colinas bellas, del Amor Eterno.

lunes, 14 de diciembre de 2020

ESTRELLA DE AMOR




 Ser humano elevado, estrella de Amor.

Letargo en un día gris de estrellas fugaces. Consuelo de Almas nobles que brillan al son del Amor.
Fuente en el día, agua en la noche, mansedumbre de Amor.
Reina y trono, Luz en la oscuridad. Ansia de remarcar palabras que con tu dicha, llamen a dicha ajena.

Ausente de odios, la belleza cubre el corazón.
Ausente de bajas vibraciones, el corazón reparte Amor.
Ausente de temor, el corazón se tiñe de Esperanza.
Ausente de sollozo, el corazón se interpreta alegría.
Ausente de rencores, el corazón se vuelve niño.

Porque las ausencias de bajas vibraciones, trazan cánticos de Luz y de Paz.
Porque las vivencias colmadas de Esperanza, son timón en noche oscurecida.
Porque las vivencias del Espíritu al son del Alma, invitan al Amor.

Entusiasta de experiencias amables, el ser humano se vuelve siempre niño.
Y ese niño, en el Alma, es un cántico nuevo, de Esperanza y Amor.

El niño que vive en el sollozo, está pidiendo un trozo de comprensión en su vivir. Porque para vivir bien no son necesarios los aderezos, ni las prestancias de fastos ni de joyas.

Porque para vivir bien, consigo mismo, solo es necesario no ir a tientas por la vida, y será así, cuando te recuerdes, ser humano... Amor y Luz

domingo, 13 de diciembre de 2020

¿QUÉ SON LAS ESPINAS PARA EL BOSQUE?

 






Las espinas... ¿Qué son las espinas para el bosque?

 

Las espinas forman parte de la manifestación de la flora, pero nada es casual; las espinas están para preservar su fruto, su tallo, la planta en sí y aún así, en las propias espinas pueden albergar las flores.

Así ocurre con el ser humano y sus vivencias, esas que aunque se tornen difíciles contiendas, siempre llevan, en su Esencia, una flor, para ofrecer a ese Alma que se involucra en las difíciles vivencias del plano físico.

 

Y ¿para qué, el Alma elige difíciles vivencias, antes de encarnar? Te preguntas...

El Alma, creación Espiritual, es muy curiosa y antes de encarnar se involucra en retos sucesivos de Luces y de Sombras, dependiendo de ese trazado que miró junto al Espíritu, ese que Es y permanece desde el antes hasta el después.

 

Existen acuerdos de Almas y unas se prestan en su propia experiencia a la par que lo hace en unión a los diferentes proyectos, de otras Almas.

 

La vivencia no es quietud, la quietud se experimenta cuando el Todo, observa la parte, siendo Este, inalterable, Absoluto, Esencia de Vida, Esencia, de Sí mismo.

 

Pero esa quietud, Siendo, también es parte de las experiencias al proyectar vivencias a través del Espíritu.

 

El Alma oscura, por los sucesos, es tan blanca como la más sutil de las Almas, aún teñida de tintes diferentes para experimentar diversidad de vivencias.

 

Los lutos son amargos, cuando vierten las experiencias, muertes o letargos de Amor.

Pero de los lutos, siempre surgen los colores.

Nadie, al nacer a esta vida, está exento de una experiencia nueva,  pero desde su nacimiento, el velo de la Vida cubrirá los recuerdos.

Nadie, al nacer a la vida, lo hace porque Dios así lo dispuso, sino que son las propias Almas quienes se involucran en grandes retos.

 

Una vez completada la rueda de las encarnaciones, las Almas viven en la inmensidad de la no materia. Porque existen diversas encarnaciones del Alma. Pero las Almas, aún encarnando, cada una lleva su propio código, sin derivarlo al encarnar, siendo únicas e irrepetibles.

 

La Inmensidad es infinita y las derivaciones, también.

 

El mayor reto que nos presta la vida del plano físico, es el despertar hacia nuestra Realidad hermosa del Amor, y el recuerdo de nuestra Inmortalidad, nos secará tantas lágrimas, cuando perdemos a un ser querido, al saber que sigue existiendo...

 

Celia Álvarez Fresno. 13-12-2020.

 

Celia

sábado, 12 de diciembre de 2020

¡ALTO!

 




Ya no tiene caricias el niño aquel que quedó solo un día.

Ya no tiene caricias ni el Cielo, ni siquiera las nubes, cuando son ignoradas por el corazón.

Ya no tienen caricias los seres solos, que perdidos en la tristeza de la soledad, vierten susurros hacia  esa caricia del viento, única compañía. 

 

Cuánta soledad tiene la vida, cuando duerme el corazón, cuando ese corazón se asusta con las tristezas y desdenes y se encoge en sí mismo para no ser dañado.

Cuántas vidas muertas mueren en la vida aunque sigan viviendo, y cuántos sucesos hacen temblar los pilares de nuestra vivencia...

 

¡Alto!

Vale ya de tristezas, me dice el Alma positiva.

¡Alto!

¿No ves cuánta hermosura llevan tantos ojos que miran las situaciones con esperanza?

¿No ves esos rayos que envía ese Sol expectante y feliz?

¿No ves las orquídeas que se mantienen vivas, aún después de muertas, por haber tenido un lugar hermoso en el corazón, cuando un día fueron regalo de tú Amor?

 

Ser humano... No tengas pesares. No tengas cubierto ese positivismo, con la sábana oscura de la decepción.

 

 ¡Alégrate!

 

Porque las olas grandes, siempre se sortean cuando nuestra percepción se muestra positiva y capaz de sortearlas.

 

Ser humano... ¡Qué hermoso y que grande eres!

Celia Álvarez Fresno 12-12-2020

viernes, 11 de diciembre de 2020

ESPÍRITU Y ALMA, EN LA NATURALEZA

 





Las vivencias establecidas antes de encarnar pueden tornarse también vivencias libres de trazado, por la libertad humana.

Las vivencias establecidas siempre responden a una causa, a una circunstancia a vivir, acomodada a la evolución del Alma.

 

Cuando el Alma encarna en ser humano, no lo hace de manera casual, ya que el Alma, en conjunción Espiritual, elige vivencia a transitar, aunque sea de dureza absoluta, ya que desde la Inmensidad, el paso por la Tierra, es un espacio de tiempo ínfimo, comparado con la Totalidad de las experiencias.

 

El Alma es blanca o gris dependiendo de las vivencias transitadas.

 

Las Almas son cúmulos de Energía, en los que el aprendizaje trazan sus vivencias. Quien vibró en dureza experimentará esa dureza en sí mismo. Quien subió peldaños de trascendencia hacia el Amor, regresará para brindar Amor al caminante de la Vida.

 

El Alma puede ser enorme, Amorosa, sabia, infinita presencia desde lo inabarcable, o puede ser dura, pétrea, hostil; trazadora junto a la Mente, de los mayores despropósitos en su encarnación.

 

El Alma es moldeable a las manifestaciones de la razón mental.

 

La mente encarnada lleva su conexión con la parte espiritual, -Espíritu-Alma-, y juntos pueden elevar sus percepciones y sentimientos o aquietarse en la más absoluta oscuridad.

 

El Alma, -prolegómeno del Espíritu, que siendo en lo Eterno-, se interpreta Alma, para transitar y vivir a través del humano.

 

El Alma es un Todo en sí misma, ya que tiene la capacidad de crear, de expandir, de involucrarse en grandes retos.

 

El Alma no es mortal, porque nunca ha nacido, y en sí misma lleva diversos colores en sus manifestaciones.

 

El Alma Es en todo viviente y en cada cual se adapta a sus experiencias: los animales, las vegetaciones, las manifestaciones aire-fuego, todo responde al Alma Universal.

 

El Alma es ese gran Paraguas, con su tela, sus varillas, su empuñadura, como también es el Ser que lo contiene.

 

El Alma es de colores brillantes u opacos. Es hacedora de misterios y realizaciones espirituales.

 

El Alma encarnada va capitaneada por la razón y por ello, el Alma sigue los dictados del bien-mal, dependiendo de los pensamientos cuando forman parte de la razón oscurecida o Luminosa.

 

El Alma es pura cuando se interpreta Naturaleza y reparte instinto, y Vida, y Creación.

 

Porque el Alma es bella y armoniosa cuando vive  vibrando  en  Creación y Luz eterna.  Pero el Alma... es solo timonel, cuando la dirige la Mente.

Celia Álvarez Fresno 11-12-2020

martes, 8 de diciembre de 2020

EL CUERPO HUMANO Y LAS ESTRELLAS

 








El ser humano es levedad, dentro del proyecto existencial. 

El ser humano, en su experiencia física representa una ínfima porción de tiempo, pero a la vez, determinante para la experiencia de las Almas, en su encarnación.

El ser humano, dotado de inteligencia, de percepciones, de vivencia elegida, así como derivación de la misma, es una experiencia única, pero repetida tantas veces por el Alma encarnada, hasta concluir las experiencias pactadas.

¿Ves cuantos seres humanos viven en el Planeta Tierra?

Tantas y aún más... muchas más, son las Estrellas en el Cielo: unas están ya muertas cuando contemplas el firmamento y aún así, brillan a tus ojos.

Cada ser humano, encarna, y junto a él, lo hace esa estrella celestial. Su misión es establecer unidad y en su encarnación, el ser humano, desde el comienzo de su andadura, su instinto le hizo mirar hacia esas estrellas Celestiales, conociendo que unas mueren, pero dejan su testigo a aquellas otras que se forman como producto de un Asteroide que se multiplica.

Las Estrellas no tienen conocimiento pero sí forman parte de la Sabiduría. Las Estrellas están siempre pero necesitan de oscuridad para brillar.

Las Estrellas albergan sabiduría y en el Magno Universo, conocen su función y se interpretan genialidad o silencio, según elección del trayecto humano.

Las Estrellas no tienen forma de puntas, sino que su reflejo se expande en la misteriosa habilidad para proyectar sus vértices.

Las Estrellas son vida, y te preguntas si ellas piensan y yo te digo que el pensamiento lo genera la Mente encarnada, pero el pensamiento Universal, en Todo Es.

¿Crees que un árbol piensa en hacer brotar sus flores?

El árbol sigue los dictados de su núcleo y su núcleo sigue los dictados del Núcleo Universal de la Vida.

Todo está en función de todo y los alimentos están servidos y los trazados Universales, están servidos y las manifestaciones en todo lo creado, Son.

TODO Y TOTALIDAD.

 


El Todo y la Totalidad son la conjunción de las Partes.

En ambas vertientes existen sus derivaciones, por ello, hablaré del Todo como "Parte" que se involucra en la Existencia plena y la  Totalidad es el culmen de la Existencia blanca u oscurecida.

Cuando el Todo, derivado de la Totalidad, se involucra en las distintas Vertientes de una única Realidad, es por ello que el Todo es parte de dicha Totalidad. 

La Totalidad es la no derivación de parte alguna, pues la Totalidad acoge al Todo y a la Parte.

El Todo,  es tu cuerpo, a su semejanza con todas sus percepciones y sentimientos que la Totalidad.

Y la Totalidad es el Todo, que en Todo Es, con sus derivaciones. Tu cuerpo es un todo, pero a la vez tus sentimientos y pensamientos hacen tú Totalidad, junto a las realizaciones percibidas, vividas y experimentadas.

Dios es la Totalidad de muchos Todos.

Un ser humano individual es un Todo, pero no es la Totalidad, pues la Totalidad serían los Todos llenos de Parte.

El Todo alberga Luces y Sombras y esas Luces y Sombras derivan en sentimientos y en realizaciones que pueden ser luminosas o sombrías.

La Totalidad son todos los conceptos, las vivencias de las distintas manifestaciones en cualquier parte o Dimensión.

El ser humano alberga al Todo, que puede ser Amor o interpretación sombría (dependiendo del Alma). Es juez y parte. Es lección de aprendizaje y a la vez es Sabiduría plena en el encuentro Consigo mismo, sin ser Sabio ante la Totalidad.

Cuando el ser humano se encuentra con su Infinitud, ya todo es comprendido y sus juicios, sus cuitas, sus desarrollos espirituales, están ligados a Sí mismo, junto a la manifestación de las Dimensiones en sus diversos estados de Conciencia y de Consciencia.

El ser humano es Alma y es Espíritu. El Espíritu es el que Es y el Alma es parte Espiritual, que puede ser luminosa y oscurecida.

"El Todo alberga la parte y la Totalidad alberga al Todo y a la parte"

Celia Álvarez Fresno. 8-12-2020


lunes, 7 de diciembre de 2020

SER Y RAZÓN

 






A las Cimas Espirituales se sube con el beneplácito del Alma y la predisposición de la Razón.

Para alcanzar la Cima es necesario haber partido de ella con la finalidad de mostrar pisadas y recuerdos de Amor.

 

Desciende de la Cima, el Ser bendito que busca ir al encuentro de las Almas, para trazarles un rumbo nuevo.

Desciende de la Cima, el Ser que se involucra en plano físico, -olvidando recuerdos-, para comprender al humano, que olvidó su Casa.

Desciende de la Cima, el Ser que ya alcanzó las victorias de Luz, para mostrar pisadas y recuerdos. Para regar de Luz las estancias oscuras de la vida.

Desciende de la Cima, un Maestro que fue alumno en las distintas vertientes de la Montaña. Y que habiendo alcanzado Sabiduría y recuerdo de Amor, se percibe unido a la Fuente, y entona lo que la Fuente dijo:

“Has llegado a tu Casa, con bolsillos vacíos de sentimientos bajos.

Has llegado a tu Casa, con bolsillos colmados de desinterés por las fortunas de baja densidad.

Has llegado a tu Casa, siendo  Alma Luminosa, abrazado a esta Fuente, que perdura en sus aguas.

Has llegado a este Universo de Conciencia plena: plena de Consciencia de Luz. De Consciencia de Sombras, esas que abrazan con el triste abrazo de la caída.

 

Has llegado a este Universo de perpetuidad, sin hora de llegada, sin hora de partida, sin sueños... sin avatares de la vida física.

Has llegado, después de la agonía y aún así, tú Ser se desdobla para sembrar ayuda, pues un Ser de Amor, cuando encarna humano, sigue siendo Ser puro en la Cima, porque ya alcanzó su ruta.

Has llegado después de haber partido y en esa partida, cuando un Ser de Luz encarna, puede olvidar su ruta y vivir encarnado tanto tiempo como experiencias realice para avanzar.

Porque una ruta establecida, puede derivarse o aquietarse y así, el Maestro que va él lección del Todo, pierde el Libro de sus rutas detrás de la ignorancia de saberse Luz en la Inmensidad.

 

Las rutas de la vida física son tan variadas...

Los pasos llevan tantas derivas que, un Ser elevado puede comenzar de nuevo en su letargo y así, aquietar la vivencia espiritual.

 

Te preguntas: “¿Cómo, si Dios es conocedor de los devenires, deja que el Alma noble de sus rutas?”

 

Y Él responde: “Porque en las experiencias, todo es Libertad. Y Él inspira pero no realiza y deja hacer aún conociendo el resultado antes que sean los hechos”

 

Dios no lleva papeles para ser firmados como compromiso. No lleva facturas para cobrar sucesos. No lleva opiniones para zanjar palabras.

 

Porque Dios lleva el Amor y el descuento de Amor, pues quien encarna en Amor tiene la opción de regalarlo y compartir con sus hechos, o por el contrario, olvidar y en ese olvido, el Amor ya no es Fuente de Amor, sino que es un descuento de vivencia de Eternidad.

 

Cuando un Ser de Luz encarna en el plano físico, las trabas de la Sombra son inmensas, entonces la Luz fluctúa y pierde consistencia; pero cuando superados los pasos de las derivas, se eleva, regresa a Dios, Cima y Casa eterna que le conminó a interpretarse mortal para mostrar la Realidad del Camino.

 

La Esencia infinita Es, en el interior humano y en todo lo que las Almas alcanzan a contemplar.

 

Celia Álvarez Fresno 7-12-2020 Celia

domingo, 6 de diciembre de 2020

DIOS DESDE LO ABARCABLE

 






Dios, adorna las moradas con el Amor y la superación.

 

Quien cree en Dios, se afianza en su vivencia de Amor.

Quien cree en Dios, alaba su Existencia.

Quien cree en Dios, se involucra en la vida, con la seguridad de alcanzarle.

Quien cree en Dios, apacienta rebaños desde su reflexión y reconocimiento en que todo sucede como lección y aprendizaje.

Quien cree en Dios, se mira a sí mismo, mirando desde la Consciencia, el motivo de su trazado.

Quien cree en Dios, acepta a la Humanidad, con sus Luces y sus Sombras, ya que los caminos elegidos son diversos y todo lleva hacia una finalidad.

Quien cree en Dios, cree en Sí mismo y jamás se derrota espiritualmente, aunque la derrota parezca   ser segura.

Quien cree en Dios, vive convencido de sus pasos de Amor, porque si la palabra dice “creo” y la actitud del sentimiento del corazón no asume, la creencia es baldía.

Quien cree en Dios, no distingue razas ni lugares; conoce el Amor, entona bendiciones, acuna con su vibración de Amor, cada rincón Universal.

Quien cree en Dios, no está a merced de los juicios de la tierra y sigue su sendero de Amor.

Quien cree en Dios, no se alimenta de halagos ni de triunfos,  esos que no son más que reconocimientos del ego raso.

Quien cree en Dios, siembra frutos y admira belleza aún en un cauce seco.

Quien cree en Dios, no traiciona, no juzga, no deja su potestad de Amor, en manos banales.

Quien cree en Dios, establece pacto de unión sobre sucesos y creencias divergentes; sobre juicios del ser humano injusto que teme al otro.

Quien cree en Dios, ama desde el sentimiento aunque reciba desdén por parte del amado.

Quien cree en Dios, dulcifica vidas, establece pactos de Amor, une en concordia.

Quien cree en Dios, cree en sí mismo y en él, lo ve y se asienta en vuelo raso ante sus carencias y se eleva en vuelo Eterno ante su Sabiduría.

 

Porque quien cree en Dios, también sabe creer en sí mismo y en todo lo que abarca su Alma, en sincera concordia. 

 

Quien cree en Dios, no le importa el juicio ajeno, ni las piedras que le hieren, porque su Luz le hace mirar al otro, desde su propia Luz y comprende y acoge y responde a las palabras oscuras, con el agradecimiento que da el sentirse grande al no dejar que sea la mente quien emita juicio.

 

Y los seres humanos seguimos los caminos y los juicios se emiten y el Juez físico dicta sentencias y Dios, dice:

“Sé tú, tu propio Juez, y emplea el código que mora en tu Alma cuando juzgues a los otros”

 

Celia Álvarez Fresno 6-12-2020

Conocimiento y Sabiduría

 




El Conocimiento es intrínseco a la Sabiduría pues esta, regó conocimiento.

 

Los seres humanos que encuentran sentido a sus vivencias, encuentran también, Camino.

 

Los fusiles que entonan las muertes del humano contra el humano, están contempladas como vibración rasa de desconocimiento del Ser.

La barbarie está sembrada cuando la mente vibra oscurecida y se involucra en matanzas.

 

El ser humano que ensombrecido traza contiendas es porque en él, vive la contienda. Un ser despierto a la Luz ve concordia, Luz y armonía y eso reparte.

 

Los Universos tienen diversas moradas:

En unos, vibran seres que no tienen nada en común con los seres físicos más que, la gota de la misma Fuente, aunque su derivación tome formas y sentimientos alejados del humano.

 

Imagina los Universos como células de un Todo:

Las células de un cuerpo, se enferman, se multiplican, se atacan, y mueren y así muere el cuerpo.

Imagina el Universo de los Universos, como una gran Célula que envuelve todo, y en sí misma, vive la derivación de la materia y la diversidad de sentimientos.

El Todo es Continente y Contenedor de todo lo creado.

Los Universos, contemplados desde la Totalidad, son tan grandes y tan pequeños como la Totalidad desee.

Los límites de lo irreal están establecidos por las creencias.

 

Para la mente humana todo lo que no alcanza a comprender, es irreal. Para Dios, Totalidad, todo es alcanzable, todo confluye, se separa, se expande o se achica.

Las diversas experiencias son el Libro de la perpetuidad y del Conocimiento existencial. Todo viene y va, con una finalidad, y todo confluye en el Ser Eterno.

No has de imaginar a Dios como único punto de las derivaciones, sino como el Ser único del que pende y deriva la Existencia.

Los cuerpos Celestes vibran en sintonía y para la Totalidad los cuerpos celestes, (inmensos e inalcanzables para ti), son partículas de Sí mismo.

 

Deja volar tú Sabiduría y percibe la Sustancia infinita en Ti.

 

El ser humano no es el único habitante de la vivencia Universal, pero sí es una experiencia de la cual, derivan multitud de experiencias nuevas:

Cuando el Alma se encarna, vivirá diversas experiencias y todas ellas serán recibidas por la Totalidad como experiencias propias, porque en cada una de las experiencias físicas, está Él, con la sabiduría viva o acallada.

Los constantes arquetipos de las vivencias, entonan diversas experiencias y ante ellas, se puede recrudecer la vivencia o alcanzar la liberación de la Materia. Vivir en la Materia conmina a la experiencia de los sentidos. Vivir en la Espiritualidad, absorbe los sentimientos y las percepciones, desde la libertad física, pero aún así, están medidas por la Totalidad espiritual.

 

Si encumbras la belleza, en las experiencias, serás belleza otro día.  Si encumbras la oscuridad, en las experiencias, serás banalidad otro día. 

En los Universos todo es movimiento y todo son experiencias. Nada muere para siempre en su Esencia; -ni las semillas del vegetal, ni las células de las vidas, ni las manifestaciones pétreas, ni las gotas de la Fuente, se terminarán un día-.

 Todo es vivencia y Vida, y recuerda:

“La casualidad nunca hace brotar las flores”

Celia Álvarez Fresno 6-12-2020

sábado, 5 de diciembre de 2020

LOS COLORES Y EL ALMA

 














Los colores son expresiones del Alma y cada uno tiene un significado y una vibración. Todo se rige por un Principio.

El gris es derivación del azul .

El negro se asocia a la frustración, a la Muerte, pero el negro es el referente hacia el que inciden todos los colores, ya que el negro es el último eslabón hasta el amanecer del blanco, nuevo.

 

El blanco, tono del Alma limpia, que entona Esperanza cuando surge de la Totalidad.

 

El gris se afianza en el blanco, cuando nace, y deriva hacia el negro cuando no participa su extensión nívea; por ello, es un color con simbología de Amor, por el camino intermedio entre el Alba, del que parte, y la conciencia de aquietarse antes de teñirse de negro, que le espera.

 

El Amarillo, parte del blanco y va camino del rojo -de la sangre-, aunque,  como benefactor de Luz, se aquieta antes de teñirse, y se torna amarillo, como el Sol, para iluminar las vidas.

 

El azul, parte del blanco, pues azul se torna cuando el mar refleja quietud, pero sigue de blanco inmaculado, al rizar las olas con su espuma.

 

El verde, parte de la Tierra, del marrón que acomoda piedras y tierra firme, y se interpreta verdor, para que la deriva del sustento, dé su fruto y en ese fruto, de verdor impoluto, brillen flores blancas.

 

Por ello, los referentes de la tonalidad de la vida, han de fundamentarse en el brillo armonioso de la Totalidad.

 

La Energía carece de color, pero se representa como hacedor de la blancura, representada como Energía de Luz.

 

La vida es Color, no existen las casualidades.

 

El verde, para la Tierra, esfera física. Porque el sustento necesita del verdor en la función que desempeña, para oxigenar la vida y convertir siembras, en frutos que alimentan las vidas.

 

El rojo, color de la ira, de la sangre, de lo físico, se muestra,  para regresar el blanco Eterno de la Luz, limpio de nubes y de lutos.

 

Igual que el ser humano, los colores tienen su función, y todos hemos de regresar a donde, un día partimos, para experimentar Vida a través de nuestras vibraciones claras u oscurecidas.

 

Celia Álvarez Fresno 4-12-2020.

viernes, 4 de diciembre de 2020

CRUZA EL MAR A ZANCADAS


Cruza el mar a zancadas. Vuela sobre la carretera.

 Mira desde el abismo, cómo se levantan las crestas afiladas, más lejos que el olvido. Porque el olvido, cava sus sentimientos, en el fondo del río, o en el fango, o en las llaves cerradas de los sótanos fríos.

Que importa si el Mundo ya no es Mundo. Si la Tierra se mueve, o deja de girar por siempre. Lo único que importa es, que sepas mirar la flor cercana, sea grande, o pequeña. O altanera o... sencilla. Lo importante, lo único que importa, es que seas capaz de ser tú y a la vez, admirar lo Grande y lo Pequeño, dejando que la lejanía... siga su curso.

EL SER HUMANO. UN UNIVERSO

 




El ser humano es el Universo de la propia Célula, así como lo es en los diversos cuerpos de diferentes especies encarnadas.

En tú cuerpo habitan los ríos que riegan como cauces o ramificaciones venosas que dibujan árboles y arboledas regadas de vida.
En tu cuerpo existe masa muscular que acoge sin ser vista en su totalidad, a los microorganismos, a las células... esas que tienen invasores y se enzarzan en feroz lucha. Los músculos, soportes y acogedores de tanta vida...
En tu cuerpo existen invasores que vienen a guerrear para acabar con sus presas... pero quien gana sometiendo al otro, muere. ¿O no muere el cuerpo cuando gana la batalla, aquel intruso que quería matar?
Porque el intruso piensa que se va a acomodar en ese nuevo templo conquistado, pero no recuerda que quien gana matando, él es la gran víctima del suceso...
El ser humano... el cuerpo humano... forma parte del entramado existencial. Es un Universo.
Aún así, la Consciencia humana, que establece unión con la Consciencia Divina y así, se interpreta Totalidad, cuando abandona el plano físico, llevando en su Alma la difícil experiencia de la Materia.
Los seres físicos mueren a la vida pero no es baldía su encarnación, ya que, las muestras de su vivencia quedan grabadas en los Códigos existenciales y la Consciencia del Alma hace que su aprendizaje sirva para el Conocimiento Espiritual, y esa experiencia será su base cuando regrese a una nueva vivencia.
Porque el Alma se puede involucrar en la experiencia de dureza absoluta y aún así, cumple funciones establecidas antes de su encarnación. Y aún así, el ser humano que se interpreta sombra, sabe que siempre el Amor ha de ser la bandera del navegante.
Ser humano: Tú eres un Universo y tal vez, aún no lo recuerdas.
Ser humano: Eres un Ser completo, hermoso, aunque el espejo refleje esa imagen que no te agrada.
Ser humano: Eres un Alma que invita a otra Alma a seguir las derivaciones de la vida.
¿Quieres ser Amor? Pues has de ofrecer Amor, y así tu Universo será ese reguero de Luz que tanto te gusta admirar en las Estrellas del Cielo y que piensas tan alejadas de ese Universo que eres Tú.
Lo grande, lo magestuoso, lo brillante, se abraza e incide en Tú interior.
Y aún así, ser humano: ¿Te percibes poca cosa?
Çelia Álvarez Fresno 4-12-2020

jueves, 3 de diciembre de 2020

TODO Y NADA

El Universo es tan grande como Ser -que nadie puede imaginar ni transitar desde la Razón. 

 El Universo es porción del Todo y el Todo vive en tantas realidades, como pensamientos tiene. ¿Te imaginas un lugar que no sea abarcado por la Luz ni por la Sombra? ¿Te imaginas una Nada sin nada? ¿Te imaginas un Todo sin nada? Todo y Nada, son conceptos que reverberan en la mente, como posibilidad, sin sentencia fija. 

 Los sentimientos de duda sobre una realidad, se transforman en irreales. 
 Los conceptos sobre una irrealidad pensada, se transforman en irreales. 
Pero ¿qué es la Realidad? La realidad de un suceso acaecido es real como real es la realización. 

Para la Mente, es irreal todo aquello que no asume, y lo desecha por inabarcable. 

 La Mente percibe a través del conocimiento, que también puede imaginar a través de conceptos conocidos, tras los cuales, construye una idea. El Alma es Éter; es inmaterial y no necesita conceptos firmes para construir una idea.

 El Alma es sentimiento claro u oscuro y en él mismo, construye alas de Amor o ponzoña gris. 
 El Alma se define a sí misma, como Suceso. Porque al estar unida a la mente puede “suceder” que sea acallada tras la negación de su existencia, como también puede “suceder” que sea venerada al ser reconocida como parte espiritual De Dios. 
El Alma se construye como se construye una vivencia, partiendo de un principio, transitando un trayecto y alcanzando una meta enhebrada a Luz u Oscuridad. 
 El Espíritu es innegable, inalterable, Ser de la Creación que se interpreta diversidad: En la Naturaleza, en los seres que la pueblan, en los Satélites, en los Planetas... 
 Te preguntas por qué siendo Espíritu inalterable, una Estrella fagocita a otra Estrella ¿qué busca en ello? y yo te digo que en la Naturaleza todo se destruye y se construye siguiendo siendo el Espíritu, Ser inalterable, y dejando determinación a la vivencia. 

 El Espíritu es la señal que indica al Navío, su final de Experiencia y su comienzo. 

La travesía no será cuestionada pero sí, prevalece la decisión de quien vive. 

El Cosmos es bello. La Historia lleva sus conclusiones.

 La Ciencia avanza, pero tiene límites, porque un sombrero no puede ser más pequeño que la cabeza que pretende lucirlo. Es maravilloso reconocer que las maravillas existenciales se esconden en lo más recóndito de nuestro interior. Celia Álvarez Fresno 3-12-2020