Ingredientes:
2 corazones
una pizca de sinceridad
un baso de admiración
una rama de amistad
un pellizco de ceguera
1/2 Kg de pasión
Se vierten todos los ingredientes en un recipiente transparente. Se revuelve con mimo varias veces.
Cada mañana se toma una cucharadita.
Es milagroso.
Hasta donde alcanzo a comprender… En nuestro Yo, habita la Permanencia. Se instala la Quietud. Se vive la Libertad. Se encuentra el Conocimiento. Se siente la Verdad. Se absorbe la Sabiduría. Se palpa la Realidad. Y la gran Realidad es que Yo... es Tú. El yo Racional, comete errores. El Yo Espiritual, nos enseña el Camino. El díalogo no se hace esperar mientras la vida transcurre, entre Luces y Sombras.