¿Qué puede llevar a una madre a tirar a su hijo recién nacido a la basura?
Es algo que me he preguntado muchas veces y para lo que aún no encontré respuesta. Entre otras cosas, porque pienso que para hablar sobre algo de tamaña magnitud, es necesario pasar por mil situaciones, y no solamente atisbarlas detrás de la ventana.
Me parece inconcebible desprenderse de algo tan tuyo, tirándolo a cualquier cloaca, como si fuera un desechable cualquiera...
Pero eso lo pienso ahora, que estoy en la tranquilidad de mi hogar, en donde no existen carencias.
Tal vez la desesperación ante un futuro tapiado a las oportunidades; una soledad sin límites; un corazón frío al no haber tenido nunca quien le diera calor; sean los causantes de tamaña vivencia.
Hace mucho tiempo que soy aprendiz de “no juzgadora”, aunque aún estoy en esa escuela difícil para superar los estudios de la comprensión.
Soñé que me encontraba con una joven a punto de tirar a su hijo a un contenedor y entonces, le miré a los ojos y le dije:
“Ven conmigo”, y hablándole de la vida, me contó de la suya repleta de carencias e impotencia para sacar adelante a su niñito; por lo que poco a poco, llegamos a un hogar que esperaba sin éxito lo que ella había recibido.
Y entonces el futuro se abrió en dos mitades, con luces en la noche.
Determinadas situaciones son sencillamente incomprensibles. No me siento con fuerzas para afirmar que haría otra cosa dadas las mismas circunstancias.
ResponderEliminarAbrazos.
Es triste ver esto. Toca la sensibilidad en lo más profundo. Tampoco juzgo a quien tome tan lamentable desición, pero, me da mucha pena que esto ocurra.
ResponderEliminarEl final del texto nos muestra la esperanza de ese bonito sueño...
un abrazo
besos
Querida Celia tus escritos son desde el viento, para el viento y
ResponderEliminarcon el viento,para toda aquella persona que tenga la sensibilidad a flor de piel.
La persona anónima no tiene voz ni voto, porque no es capaz de dar la cara.Siempre me acuerdo de Otis, viendolo todo tan claro, el te puede ayudar a superar este bache, que si te das cuenta es una enseñanza más, no podemos gustar a todos, en cuanto a las madres que tiran los niños a la basura es inconcebible, porque siempre hay otras alternativas, quizás la enagenación universal sea tan grande que demos más valor a las cosas materiales que a las personas.
BESITOS
Uf, amiga... menudo tema. Creo que si un ser humano (normal) llega al extremo de tirar a su bebé a la basura, ese mismo ser humano ha muerto en un basurero mucho tiempo antes...
ResponderEliminarOtra historia son los locos o desequilibrados, los inconscientes y los egoístas patológicos... quien sabe quién es quién...
Un beso, cielo.
Natacha.
Querida amiga,
ResponderEliminarEstoy muy de acuerdo con Natacha; si una persona es capaz de hacer eso ya ha muerto en un basurero. No creo que haya razón alguna que justifique ese acto, pero no solo por el lazo maternal como comentas sino ya porque ya cualquier persona es digna de estar fuera de la basura, porque cualquier persona tiene que tener el derecho a la vida aunque ésta sea ruín, dura o desesperada. Nuestro principio humano es el derecho a nacer, a sentir, a vivir y por supuesto el derecho a decidir. Si no puedes o no quieres o no te ves capaz de ofrecer un hogar a tu bebé, cédelo a quien sí pueda hacerlo pero no lo tires a la basura porque entonces no sólo te desprendes de él sino que lo abocas a una casi muerte segura. Él no es responsable de tus equivocaciones.
Me alegra leerte de nuevo.
Un beso amiga.
Acabo de ver en la tele, en undocumental sobre leones, como una leona, cuando se ve incapaz de alimentar a sus tres cachorros los abandona puesto que su muerte se puede suplir con una nueva camada...
ResponderEliminarAl final los había adoptado otra leona y no murió ninguno ;)
Somos en el fondo como los animales, aunque nos creamos superiores
Un abrazo
Yo creo que cada persona es un mundo,
ResponderEliminary cada historia es cada historia.
No lo veo normal, tb es cierto.
Pero hay muchas razones que puede tener alguien así,
que igual yo no llego a entender, claro.
Besos, Celia!
Me encanta lo de aprendiz de no juzgadora en la dificil escuela de la comprensión. A mi me pasa lo mismo. Procuro entender, no juzgar pero hay situaciones que se escapan de mi comprensión. Un beso grande
ResponderEliminarCelia, amiga, este post me mata. No apruebo a las madres que hacen eso. Sea cual sea la situacion que las lleva a hacerlo pienso que no esta bien. Refelxiono mucho en este tema amiga, es tema de noticia en los diarios y TV local. Me duele y nada puedo hacer, pues no podria recoger a todos los bebes que abandonan por ahi como si fuera basura...........Me duele y me entrsitece. Perdon, me exedi en el comentario. Besos, cuidate mucho. Me voy reflexionando.
ResponderEliminarHola Manolo. Mi gran poeta de la Naturaleza...
ResponderEliminarSí. Es un tema duro de verdad y muy incomprensible, pero es una gran realidad que escuchamos con mucha frecuencia.
Un beso, amigo.
Carolina preciosa. Son situaciones de la vida, lamentables pero están ahí.
ResponderEliminarUn beso
Hola Carrachina. Otis, es amigo de todo el que vive, porque vive en todos.
ResponderEliminarTienes razón. El Anónimo lo voy a olvidar, pero tal vez me hizo reflexionar sobre esas alas, que se estaban haciendo demasiado osadas, por querer abarcar mucho más de lo posiblemente abarcable.
Todo es por algo. La casualidad no existe.
Un besito, cariño.
Hola Celia:
ResponderEliminarTus reflexiones te definen como persona y te hacen recapacitar en estos temas tan desgarradores. No consigo ponerme en la piel de esa madre para comprender porqué... (si es que hay un porqué que pudiera justificar un acto así).
No tengo más palabras, porque estas noticias me desbordan y anulan a la hora de hablar sobre el tema (me bloqueo).
Natacha. Llevas toda la razón. Pero muchas veces la dureza de la vida, te vacía de sentimientos. Sólo así se puede intentar comprender a quien lo hace.
ResponderEliminarUn beso
Hola amiga Pantera.
ResponderEliminarMe alegra verte aunque sea sólo por tu presencia con letras.
Tal vez dentro de poco nos volvamos a ver ¿no es así?
Besitos.
Hola Amiga.
ResponderEliminarMuchas veces hacemos barbaridades que nos animales no hacen.
Eso nos define.
Un abrazo
Lourdes.
ResponderEliminarEstoy contigo en que es muy difícil ponerse en lugar del otro. Y si lo hacemos realmente no lo estamos haciendo porque una cosa es ponerse en y otra estar en.
Un abrazo