-Hola Dios.
-Hola, hija…. ¿Cuánto tiempo hace que no me visitas?
-No lo sé. Tú sí; por algo eres Dios.
-Bueno… bueno… ¿y qué te trae por aquí ahora?
-¿Otra vez con lo mismo? Tú sabrás…
-Si sé o no, no te incumbe a ti. Te pido que me digas el motivo.
-Es por eso de los sábados literarios de Mercedes. El tema va de una conversación contigo. Por eso he venido. Y además estoy segura… Tú me darás alguna exclusiva, porque ya he tenido muchísimas conversaciones contigo, y la constancia es un tanto ¿o me equivoco?
Sabes que te he recordado a menudo, que te he invocado, que te he dicho “te quiero” miles… millones de veces. Que ya te trato de tú, desde hace muchísimo tiempo. ¿Recuerdas? ¿A que lo recuerdas muy bien? Ya… ya sé que tendrás miles de cosas en la cabeza. Pero es que a mí… mi nombre… mis pensamientos…me tienes que tener presente; estoy tan segura de que te ha calado hondo todo lo referente a mí...
Venga… dime algo impactante que nadie sepa, para llegar con algo sorprendente. ¡Va a ser la bamba!.
-Hija mía… siento mucha pena por tu osadía. Siento mucha pena porque te veo muy crecida…
-¿Es malo ser alta? Por cierto… gracias por lo que me has dado. ¡Me siento tan bien conmigo!.
-Hija mía… algunas veces… mi Esencia, esa que tú llevas… que todos lleváis, queda acoquinada por los desvaríos humanos.
Os creéis dueños y señores del Universo. Os otorgáis poderes que no os corresponden. Decidís sobre otros, sin tener en consideración al que camina en el camino de la Evolución, lo mismo que tú.
No sois conscientes de que todos formáis parte de Mí, y que vivo en todos. Sufro con quien sufre; amo con quien Ama, porque en todos estoy
Unos hacen con sus pensamientos y sus actos, que mi Esencia crezca y los abarque; los otros… poco a poco, van olvidando su procedencia Divina.
-Pero… Dios… no te alargues que tengo limitadas las palabras para el relato. ¡Venga!¡Venga! Dime algo ya… me siento muy nerviosa. Deberías saber de mi impaciencia…
-Hija… debes saber reflexionar en cada acto tuyo; creo que ya es hora…
Está bien; te daré la exclusiva y tú la llevarás tal cual te la digo:
“Sólo nadie es nada”.
-¿Cómo?
-Si hija mía; sí. Todo, desde lo más grande a lo más ínfimo, ocupa su lugar en la Evolución. Debes respetar a toda la Creación, escuchando, respetando y evolucionando con ella.
Ten la seguridad de que dentro del Cosmos de la Evolución, los seres humanos sois una ínfima partícula de Vida.
-Gracias Dios, ya me voy. Rapidita como de costumbre.
Por cierto…¿Qué tenía que decir? ¿Cómo era aquello que me dijo Dios?
Sí… ya recuerdo:
“Que quien se sienta nada, no participe en los sábados literarios. Que sólo tienen cabida los mejores escritores…”
Claro… ya decía yo. Eso de los mejores Escritores, va por mí; no me cabe la menor duda.
Hola Celia
ResponderEliminarTe he visualizado como una periodista, micrófono en mano, asediando a Dios en busca de la exclusiva! jajaja
Los mejores escritores... bueno, algunos sois mejores que otros.
Buen viaje bloguero, guapa.
Un abrazo
Hola.
ResponderEliminarNo recuerdo haber tenido una conversación contigo,ni mucho menos haberte dicho “Que quien se sienta nada, no participe en los sábados literarios. Que sólo tienen cabida los mejores escritores…”
Con toda humildad:
Jesús
Aquí estoy de nuevo.
ResponderEliminarVamos a ver; soy nuevo en esto de los blogs y aún no conozco los protocolos y los procedimientos; con el mayor respeto: ¿Cómo es que arriba pides "Haga su comentario" y luego dices que lo publicarás cuando lo hayas aprobado?
Con el Alma, Yo, y la Razón, yo...puse mi granito de arena para traer la libertad de expresión a este país y para abolir la censura.
Seguro que no tienes la nobleza y el talante democrático de publicar este cometario.
Un fraternal saludo
Jesús
Hola Ardillita madrugadora.
ResponderEliminarUna cosa es lo que dice Dios, y otra, lo que interpretamos los humanos (unos mejor que otros).
Un besito con sabor a nuez.
Lucio o Jesús. Tienes razón. Ahora mismo voy a dejar de moderar comentarios. Total... siempre publico todo.
ResponderEliminarLlevas razón. Tus palabras son órdenes. Ya está quitada la moderación.
Un abrazo y gracias por tu lectura y comentario.
Jo, Celia... Te noto distinta... Mmmm. Me gustan tus conversaciones con Dios. Y sobre todo, tus respuestas a los comentarios. Así me gusta, que domines con elegancia.
ResponderEliminarBesos con la boca abierta.
¡Genial Celia!
ResponderEliminarMe has hecho sonreír, pensar, querer a esa mujer que conversa con su Dios, querer más a mi amiga que tan ingeniosamente me hace llegar ese diálogo, lleno de vida y humanidad y sabiduría... ¿Qué más puedo pedir? Sí, ya lo tengo: que pueda guardarme algo de esa paz que transmites.
Miles de besos Celia.
Llena de alegría por ser partícipe hoy, de nuevo, de estos sábados literarios de Mercedes, que de tu mano llegaron.
Mar
Ahh! siempre me ha gustado cuando dialogas con Dios. Me robas la sonrisa cuando él te hace entrar en reflexión. Y vaya reflexión nos ha dejado.
ResponderEliminarUn placer leerte mi querida Celia.
Feliz día
Un besito
Hola Celia
ResponderEliminarEse es el problema, que a veces nos sentimos algo grande y, somos tan pequeños, que como dices tú formamos parte de esa inmensidad del cosmos y cuando nos pasamos con este mundo nuestro se pierde todo el equilibrio que existe.
Preciosa tu conversación con Dios, se nota que tienes línea directa con él.
Un beso
Vaya, un relato que resucita Dioses caidos en la Nada.
ResponderEliminar¿De cuantos Dioses estamos hablando?
Demasiados, para que sean de verdad.
Uno que siendo Dios y sabiéndolo todo no sabe lo que le quieres pedir.
Otro que te hace cambiar de opinión respecto a la aprobación de comentarios a la que tienes todo el derecho del mundo, cuestionando tu nobleza y talante democrático.
Otro que dice que se llama Lucio, cuando realmente se llama Jesús,
no entiendo NADA.
En fin demasiados para ser de verdad.
Besos
Hola Merce ¿distinta?. No. Pienso que todo depende de la percepción jejeje.
ResponderEliminarGracias por este sábado literario. Me gusta regresar a hablar con Dios. Esto me ha hecho recordar que no tengo que olvidarlo por mucho tiempo. No es bueno para mi salud espiritual.
Un beso, cielo
Mar. Amiguina de idas y venidas. Gracias por tosas esas bellas palabras que me dedicas. No merezco tanto. Tengo mucho suerte de tener una amiga como tú. Llena de sinceridad y encanto.
ResponderEliminarUn beso.
Carolina.
ResponderEliminarEl diálogo con Dios es constante, porque vive en cada uno. Algunas veces cuando vamos al Todo, las cosas se ponen un poquito más serias.
Un beso, cariño
Carmen.
ResponderEliminarTu entrada me ha parecido preciosa. Has dicho mucho y concuerda con gran parte de mis pensamientos.
Recibe un gran abrazo y mi cariño, querida Carmen.
Jo, me encantan esas conversaciones que te traes de vez en cuando con Dios. Y la criatura siempre tiene tiempo de decirte algo que nos haga pensar a todos, eh?
ResponderEliminarDesde luego que somos pequeños. Somos ná y menos, vaya. Bueno, algunos más que otros...
jajajaja
Besos, Celia!!!!
Una conversación en la cima de la vida, acorralando al mismísimo Dios.
ResponderEliminarabrazos!
Hola Alfredo:
ResponderEliminarUffff. Me vas a hacer trabajar de lo lindo con tu "comentario". Le pediré ayuda al Jefe, para que me chive algo bueno. Ahí va:
Dios no cae nunca. Es uno. Y vive en todos los que viven.
Algunas veces, cuando el ser humano lo niega, Él no dice nada. Pero el que no diga, no quiere decir que no esté. Está claro que, con la actitud de cada cual, crece o no. Y entonces las percepciones de cada uno, son o dejan de ser.
La opinión sobre la moderación de comentarios, es algo que ha tomado mi razón. Así. Sin más. Y te voy a dar el motivo:
Siempre, desde que abrí el blog, me gustó abrir mi espacio y encontrar los mensajes. "Tiene dos -o los que sean- mensajes sin moderar". Eso me da subidón.
Pero es absurdo, moderar algo que más tarde -me guste o no- voy a publicar.
Sólo en pocas ocasiones, desde mi comienzo, no he publicado comentarios. Dos de ellas, porque me decían algo comprometido, otras dos, porque alguien escribiendo en Inglés, me decía una serie de chorradas que no venían a cuento, y alguna otra porque me decían demasiadas cosas bonitas... que desde luego no comparto. Eso es.
Por lo que Dios, no ha intervenido en absoluto en esta decisión que me ha apuntado un lector, y que considero aceptable.
Y ese Lucio, que se considera Jesús, imagino que quiere darle al tema un tanto de gracia, y decir de alguna manera que es Jesús -Dios-, y a mí, me parece perfecto, porque Dios vive en todos, con mayor o menos intensidad, por lo tanto si dice que Es, es que Será. Si le hace feliz, allá él.
Bueno Alfredo.
Un mensajito de mí para ti:
Muchas gracias por tu extenso comentario. Muchas gracias por este momento agradable que me has hecho pasar, y muchas gracias porque sólo con pensar en Dios, en el Todo, en la Energía, ya estas no negando lo que realmente Existe.
Un abrazo, mi cariño y mi admiración, amigo.
Lourdes.
ResponderEliminarNo concibo la vida sin Él. Vive en cada uno y somos Eternos. No creas que estoy sentando Dogma. Soy anti-Dogmas, pero digo eso que percibo, que siento dentro de mí.
Nunca sufras y tienes que saber que tu mente puede hacer que tu vida se convierta en algo que tu esperas.
Un beso, cielo.
Moderato.
ResponderEliminarHola, amiguito.
¿Acorralar a Dios? Es como intentar poner vallas al mar.
No amigo. Esto es un relato, y para la construcción del mismo, he tenido que argumentar.
Un abrazo, mientras espero tu visita.
Me encanta Celia. Es muy simpático tu relato. Sólo nadie es nada aunque algunos creen que ellos son todo. Que tontitos. Un abrazo.
ResponderEliminarcelia...esper que n0 seas de prensa r0sa...jajajaj
ResponderEliminarp0r ciert0, el mantened0r de s0nid0 que n0 sabes que llevabas era y0...y teng0 una mala n0ticia para ti:
la gravaci0n de la c0nversaci0n se b0rr0...
ya que l0 sient0000
jaj
medi0 bes0, peri0dista de la verde asturias...
leia a alfred0 en est0s c0mentari0...ell0 me llev0 a ler mas...ell0 me lleva a que me censures...¡¡¡que vuelva la censuraaa!!!!
jajja, perd0na la br0ma...me ha salid0 asi...
0tr0 bes0
jejeje gran mensaje... gran exclusiva... ¿Ves? ahora toma cierto sentido lo que siempre te decía de ser un 'Don nadie' (como paso previo a no ser nada. ;-)
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
No me extraña que algunos tardemos años en conseguir audiencia con Dios. Mientras haya "periodistas" como tu que le alegren la existencia.... a los otros, ya nos tocará. jajajaja
ResponderEliminarBueno, ahora en serio, gracias por tu comentario, me ha hecho pensar que no estoy sola... ya te contare si consigo un abrazo de esperanza.
Un besazo
Celia, !ave!
ResponderEliminarA buenas horas el dios dice que reflexionemos, que tenemos libertad, que nos espabilemos...
Pero, cuidadito dice el dios o avisa, ya sabes lo que te espera.
Todo son pegas, aigggg. Todo incognitas, pues puestos a pensar voy a pensar en la merienda y mañana será otro día.
Con este dios, es que no hay manera desde siglos. Pero por hablar que no quede, aunque sea la vacio.
Celia, has trazado un cúmulo de dudas y preguntas que como era de esperar, no tienen respuesta directa y clara desde las nubes do habita esa duda bellamente escrita por tí, felicidades, bsitos.
Menos mal que compruebo que no soy la única que andaba trastornada entre nadas y nadas.
ResponderEliminarCreo que Dios ha escuchado nuestras plegarias, la tuya abierta, directa, valiente, la mia ys eguro que la de muchos más, callada, interna, pero con mucha fuerza y juntas han dado su fruto. En realidad creoque estamos ante un nuevo misterio de la tretranidad aunque no creo que santísima: nada, jesus, lucio anneo y volando la bruja bigotes. Todos alrededor de la los sábados lietrarios. Qué Dios nos pille confesados!
En ti relato hay mucha enjundia, solo nadie es nada, si no comenzamos a amarnos y a valorarnos nosotros mismos, Él tampoco, todo comienza por uno, así que a pensar en grande, claro que sí Celia!!
ResponderEliminarUn abrazo para esta gran escritora
Hola Gustavo.-mira por donde- no me ha preguntado si yo era de la prensa rosa, tal vez sea que ya conoce que ahí... casi no preguntan por Él.
ResponderEliminarClaro que se borró la gravación ¿Crees que no me he dado cuenta?. Tuve que improvisar aquella fresecita que me dicto. Pero ¿a que casi no me he equivocado?
Un beso y medio, amiguito.
Milagros.
ResponderEliminarEso de hablar de Dios... es un tanto comprometido. Pero a mí, me resulta de lo más normal. Siento que vive en todos, y muchas veces detrás de unos ojos, le ves, en esa mirada dulce. Detrás de comprotamientos humanos, y ¿qué me dices de la Naturaleza entera?
Un beso, amiguina.
Ave... jejejejje.
ResponderEliminarPrimero... que pareces pinta y despinta; se que puedo preguntarte el motivo -soy sabionda, porque estoy de reportera, como has visto- y segundo, que puedes no darme explicaciones, y ya está asumido.
¿Sabes? La diferencia entre tú y Nadie... es que tú eres un Don Nadie. Y ese Don ya te convierte en alguien, que como sabes, para mí es importante.
Así es que tú, no eres Nada. Eres mucho.
Recibe un abrazo y gracias por invitarme a entrar en tu blog.
Un beso, y un abrazo.
Hola rosa.
ResponderEliminarMira hija... es que yo ya me he acreditado hace tiempo. Por eso he tenido audiencia con Dios. Suelo acudir en momentos puntuales. Casi siempre me hace verme tal cual soy... y eso me da fatiga, así es que como lo que deseo es vivir tranquilita y a mi modo, estoy espaciando las visitas.
Un fuerte abrazo.
Natalia... Natalia... no seas incrédula.
ResponderEliminarSi quieres creer en Dios, solamente debes pensar en ti. Verás ese abanico grande de sentimientos, y en el medio... una Energía de la que emana la Vida.
Es cuestión de aprendizaje.
Tú no dudes en preguntarme. Tengo experiencias para dar y tomar.
¡Ah! Por cierto... ni soy alucinada, ni mística... ni vivo en la parra.
Me encanta disfrutar con lo que la vida me regala.
Un abrazo.
Hola Maria José.
ResponderEliminarTu relato ha sido muy profundo, lleno de sencillez infantil, que es la sencillez con más sentido.
Escribes muy bien, y dices -dependiendo del momento- un poco de todo. Me gusta tu blog, y lo sigo desde hace mucho tiempo-
Un abrazo, amiguina.
Marian. Cada vez... me apetece más que alguna vez, vayamos a coincidir en algún lugar del mundo...
ResponderEliminarTenemos muchas cosas en común; de esas importantes que traspasas estas vidas.
Te envío mi abrazo, y la esperanza en conseguirlo.
Particularmente, pienso que si los seres humanos, no hubiéramos alterado el contenido de los Mensajes del Todo, las situaciones para la humanidad, habrían cambiado.
ResponderEliminarCada cual, a lo largo de los siglos ha debido de "arrimar el ascua a su sardina", por eso existen tantas religiones con Dogmas enfrentados.
Si todas las Escrituras, provienen de una misma Fuente, no se comprende que se dicten "normas" tan diferentes.
Cuantas luchas, en nombre de Dios... Cuantos enfrentamientos... humillaciones...injusticias... en nombre de Dios.
Nosotros, hemos hecho que hoy, el nombre de Dios, casi sea innombrable. Nos lo han dictado vengativo, Todopoderoso, tomador de decisiones poniendo sobre un mazo, la cabeza del ser humano, que espera ser guillotinado por ese brazo de justicia...
La vida me ha enseñado, que las decisiones son nuestras, que Dios vive en cada uno de nosotros. Que es esa respuesta amorosa, cuando llora el Alma. Que con nuestra actitud, podemos acoquinarle o hacerle brillar, empapando nuestra vida, con su Esencia. Y cuanto más viva en nosotros, más nos apartamos de la oscuridad.
Las sombras no existen. Las sombras son ausencias de Luz, y sin Luz, la vida llora, porque anhela eso que ha perdido. Eso que le pertenece para su escalón evolutivo.
No me preguntéis por qué, no me tachéis de prepotente, no me pongáis una etiqueta que no me corresponde, pero... siento que Dios existe. Que vive en nosotros en mayor o menor medida. Que ríe, vive llora y sufre, en nosotros. Que no estamos desunidos del Todo, ya que somos Parte, o perlitas disgregadas de la Perla de la Existencia.
Percibo la vibración de Dios, pero eso, no me hace ser diferente. Vivo intensamente la vida. Cometo demasiados errores. Soy injusta en decisiones ajenas... Pero aún así... tengo la percepción de la Esencia que vive en los que viven.
Espero que algún día, en esta o en otra vida, toda yo esté empapada de tan anhelada presencia. TODOS estemos empapados de su presencia...
Y ahora termino con un:
He dicho...
Ya sé que carezco de cuorum, pero si no lo escribo... me sentiría mal conmigo misma...
Un beso
Celia,
ResponderEliminarme recordaste a "una entrevista" que le hice yo a la Virgen, con la que gané un premio de redacción en el colegio.
¡Me gusta!
Besos
Me has decajo "acoquinada" (tengo que buscarla en el diccionario) con tan buena subida. Mirá que yo no sabía lo de los mejores escritores, bueno... me parecía que así era, pero hasta hoy no estuve convencida.. y lo digo por tí (y eso va en serio mujer!!!)
ResponderEliminarMuy buena ironía en la entrada y en tus comentarios.
un fuerte abrazo, te voy a enlazar (pero solo porque tiene influencia con el de arriba, jajaja)
Te he visto -leído- muy impaciente y dicharachera, jaja, me ha hecho gracia.
ResponderEliminarYo no he participado, pero es que no se puede llegar a todo, y llevo una temporada de locos, no hay tiempo para nada. ¿Eso significa que ya no soy buena escritora? Ay.
Un beso, Celia.
Hola Amig@.
ResponderEliminarAlguna vez, es buena cosa eso de ejercer de reportera. A ti te ha dado un premio y a mí... la ocasión de dar una exclusiva.
Un beso.
Hola Cas.
ResponderEliminarYa he leído tus entradas en muchas ocasiones. Ya te conocía... y me alegra mucho haberte conocido.
Te enlazaré a mi blog, y seguiremos con las lecturas y las participaciones.
Un abrazo.
Hola Tere.
ResponderEliminarImpacioente ¡¡¡¡¡siempre!!!!!
Soy una Aries, demasiado apresurada, poco reflexiva. En fin... ya no voy a cambiar a estas alturas.
Sí hija. Hemos participado lo mejor de lo mejor, ya que he traído esa exclusiva tan buena, que hacía distinciones entre unos y otros...
Personalmente y mal comparado, pienso que algo así ha debido de haber ocurrido con las interpretaciones del ser humano. Sólo esa explicación hace que existan tantos enviados con tantos mensajes diferentes, supuestamente llegados de la misma Fuente.
Un beso muy fuerte, y espero verte pronto en un nuevo Taller.