"La abuela Eliza oía voces que le susurraban al oído"
Página 24- línea 3 -"EL AGUILA Y LA ROSA" Rosemary Altea.
¿Será que ya está muerta y oye los mensajes del Más Allá?
¿Será que está paranoica?
¿Será que entre sueños piensa escuchar que el abuelo le sugiere "algo"?
¿Será ese amor de antaño, que le dice estrofas inconclusas, ocultas en la memoria?
¿Será su nieto que le pide agua interrumpiendo el duermevela?
Sea lo que sea, la abuela oye voces, por lo que es evidente que aún no está sorda. Esa es mi conclusión. Algo es algo.
!Qué suerte con la línea 3! sugiere muchooo, y tú, Celia has logrado convertir ese hilo conductor en una delicia, en un dulce homenaje a la vejez, que aunque sordee lo "siente todo", lo sueña todo.
ResponderEliminarMuy hermoso. Besitooos.
¡Ay las abuelas! Soñando dicen verdades, despiertas también... Si dicen alguna sinsustanciada, siempre tiene sustancia... Y todo lo escuchan. ¡Qué pena no haberlas escuchado yo mejor!
ResponderEliminarEste verano no fui al cementerio de Muros, a visitar a mi abuela. Me acuerdo de ella. ¡Cuánto perdí por no escucharla mejor!
Y con la otra, igual o peor...
En fin... Menos mal, que a veces, en sueños, las oigo.
Un besito Celia. Me acuerdo muchas veces de ti, en esta época nueva de mi vida en la que crezco conscientemente.
El arte de la abundancia en la brevedad y del punto final descansado luego de inquietantes preguntas.
ResponderEliminarEl arte en fin, de una buena escritora: vos.
Un abrazote. Tiempo que no te visitaba y me estaba perdiendo mucho de lo bueno..
Joé, de una sola línea de una página cualquiera eres capaz de sacar una historia así, eh?
ResponderEliminarEres la caña, Celia!
:)
Besos, guapa!!
Pues ya es una buena noticia, que la abuela no está sorda, jajaja.
ResponderEliminarTe superas, Celia.
Otro beso.
Pssssss, que hay abuelas que no oyen porque no quieren. Jajaja.
ResponderEliminarLa mia por ejemplo oye lo que la conviene, y lo que no la conviene lo ignora.
Besossssssss
La abuela te da paso, y tú te luces elucubrando que le estará pasando por la cabeza al oir aquellas voces que resuenan en sus oidos.
ResponderEliminarAbrazos
Muy bueno, Celia!
ResponderEliminarQuizás estaba escuchando lo radio, mi abuela siempre lo hace.
Besos
Muy bueno y divertido, la abuela aun no está sorda. Original transformación.
ResponderEliminarUn beso
Dichosos los que han tenido el privilegio de disfrutar de sus abuelas. Yo apenas si las conocí cuando era muy pequeño. Tanto caudal de sabiduría, de vida, de experiencia, apenas si necesitan oir, porque saben escuchar y no sólo con los oidos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ay si las abuelas nos contaran todo lo que oyen en sus silencios...
ResponderEliminarMuy bueno ;)
Un abrazo
Si escuchas cascos piensa en caballos no en cebras.
ResponderEliminarMe acordé de esta frase al leer lo de que la abuela evidentemente no estaba sorda, je, je.
Muchas gracias, Celia, por tu visita a mi blog; un lujo para mí.
Muy buena, Celia, eso mismo pienso yo, pueden ser tantas cosas que la mas facil es t soculción. me he divertido con esta abuela.
ResponderEliminarBesos
celia...da la casualidad que mi aguela se murio hace 17 años...celia, da la casualidad de que mi aguela no tiene lo que s dice corporeidad...bueno, huesos ha de tener aun...creo, quee no me he decidido a verla bajo su casa de madera y tierra..
ResponderEliminarbien, es mi aguela no escucha,luego yo creo esta sorda. mas sí que habla en una su habitacion , esa donde un día expiro, aunque yo no estoy muy convencido...
asi las cosas, ¿podrias decirme si esa aguela del jueves sabria como decir a la mia algo acerca de la srdera?
atentamente
la aguela de este de zamora.
Y siguen vivos... arrinconados y casi desconectados pero vivos...
ResponderEliminarEstupendo relato y ese final...perfecto. ;-)
Feliz finde.
Muy bueno Celia.
ResponderEliminarMagnífica conclusión, jajaja, seguramente la abuela no está sorda, creo que lo que hace es que oye unicamente lo que quiere oir.
Muy bueno el relato
Un beso de Mar
Y ¿por qué no va a oirlas?
ResponderEliminarQuien no ha tenido una abuela que acertaba la diana en tnatas ocasiones...
Escuchando voces...
Genial.
Un beso