Amiguinos:
Me comentáis que tengo suerte por tener tanta creencia espiritual.
Cierto es que hoy, ya lo tengo claro, clarísimo. Pero me ha costado lo mío asumir lo evidente. Y ¿sabéis? para creer de verdad, tenemos que dejar reposar un poco, cada día, a nuestra mente y saber escuchar al Alma; sentirla; conocerla es fascinante, y en el momento en el que la conoces, jamás volverá a ser extraña para ti.
Por supuesto, no soy ninguna extraterrestre. Ni vivo fuera de las circunstancias. Tengo mis pies aferrados a la vida, al camino; pero las experiencias que me hacen pupa, ya me resultan más sedosas, y comprendo mucho a los demás. Tal vez porque ahora ya, me comprendo a mí.
Un fuerte abrazo para todos. Para los poquitos que dejáis comentarios y también para todos los que entran miran y se van -que yo controlo-, y que no dejan huella.
¿Tal vez os parezco en las nubes? Pues no. Estoy terrena, disfruto con la vida -lo que puedo- tengo mis problemas, pero me siento feliz porque he descubierto toda nuestra Grandeza interior. Intento trasmitirla, y ofrecer este sentimiento que es el Capitán de mi buque de la vida.
Por cierto... disto muchísimo de estar como esa cabra que está en la foto. Que conste, que no lo digo sólo yo...
Besinos para todos.
Celia, el tiempo que le lleva a cada quien hallar su camino de superación interior es muy distinto, pero todos lo transitamos de una u otra manera. Ese es el sentido de la vida: ahondar en nuestro crecimiento. Así que sentirse en buena senda, avanzando en él es algo digno de elogiar y destacar. Muy inspirador.
ResponderEliminarGracias por compartirlo.
un abrazo.
Yo te admiro por tener esa mente lúcida llena de ideas claras. Lo mío es "un mosaico de retazos" de lo más variopinto.
ResponderEliminarAbrazos
Amiga,
ResponderEliminarme suena tu entrada a gracias pero también a justificación. No la necesitas. Tú te sientes dichosa con tu vida (y en la vida hay de todo), con todo lo que llevas dentro y has hallado... quieres compartirlo, pues adelante. Otros comparten su dolor, sus miserias, su rabia... Si no te comentan, no le dés vueltas. A lo mejor no tienen tiempo y es simplemente eso. A lo mejor no hallan palabras... Yo llevaba mucho sin pasarme por aquí y sin dejar rastro de mí. Hoy aprovecho mi jornada de lucha (estoy en huelga) para dedicarme a esto.
Y dime, ¿cómo está mi querida Asturias?
Como siempre, un inmenso abrazo, de corazón. Y besinos
No. No me preocupa en absoluto la ausencia de comentarios. Sé que es algo temporal!!!, al igual que yo, no tengo tiempo de hacer comentarios a todos vosotros.
ResponderEliminarAmiguina, Asturias está un poco pachucha, pero yo, estos días estoy en Madrid -haciendo gestiones- jejeje.
Espero que pronto nos demos ese abrazo gordo, querida Mar.
Reposar la mente y saber escuchar el Alma...¡No has dicho ná!
ResponderEliminarNo sé si algún día lo conseguiré. Quizá sea una disciplina que deba aprender. Gracias por tus compartires.
Un fuerte abrazo.
Maat
Se me ha olvidado decirte que lo de la cabra ha estado genial. Jajajajaja
ResponderEliminarMaat
La verdad Celia: esa cabra de la foto es una monada. A Mi no me importaría estar como ella, se la ve muy feliz.
ResponderEliminarEres sabía Celia, sólo cuando uno llega a conocerse, es capaz de entenderlo casi todo lo que vale la pena entender. Es entonces cuando nuestras puertas consiguen la apertura total y dejan que el viento de la existencia entre y salga con toda la sencillez y fuerza que posee, sin apagar por ello, el interior de esa llama incombustible de la vida que traspasa cualquier mundo o estado, más allá de lo demostrado y lo tangible.
Un placer leerte
Paso a agradecerte tu comentario.
Un beso y feliz día
Doy fe amigos míos de que dista mucho de estar como una cabra. Es una mujer de su tiempo con sobresaliente porque así ha sido simplemente. Triunfadora en su trabajo donde escaló hasta lo más alto, triunfadora socialmente porque además de ser una belleza interior es una belleza física, dotada de elegancia y saber estar, esposa y madre de tres hijos... Es una estrella y como tal estrella portadora de luz. Es un cordero y como tal llena de mansedumbre que transmite y comunica a quienes la rodean. Es un faro para orientar a quién lo busque sin molestar a quién vaya en busca de otro. Es una voz portadora de palabras que mucho dicen sin pedir ni esperar... como una música que suena para quién desee sintonizarla ¡Es... tan extraordinaria por equilibrada, bella y apacible! que los ojos que la miren solo la verán con la lectura de su alma... unos verán lo externo y la envidiarán... Otros verán lo interno... y se harán preguntas... Otros la verán completa y se sentirán afortunados de haberla conocido.
ResponderEliminarPues quién quiera mirar en profundidad libre, alejado de tópicos y típicos análisis críticos de conocimientos aprendidos y se abre a la lectura de sus letras, comprende que eso que dicen esas letras es conocido por su personalidad, que está impreso en ese rincón que nadie ha sido capaz de situar y que todo el mundo siente, que está alejado de todo dogma, de todo condicionamiento de todo ánimo de sectarismo o protagonismo... sentirán que esa comunicación que sugiere con tu Yo interno te llena de paz y de verdad y que es la auténtica religiosidad del futuro, la que mira a todos los hombres como parte indivisible de un TODO en el que nadie es más importante que el otro y dónde todos deben caminar hacia un fin común e integrado de cuerpo y alma.