El Sabio, que realmente es Sabio, no reconoce su Sabiduría, porque observa su experiencia como espectador y no como Creador.
Cuando el oso, da un golpe, no es culpable de matar, en su fortaleza. La culpa está es no reconocer que su fuerza, puede matar.
El Ser Humano, ha de reconocer su valía, y sólo así, dejará de oprimir a los demás.
Cuando el oso, da un golpe, no es culpable de matar, en su fortaleza. La culpa está es no reconocer que su fuerza, puede matar.
El Ser Humano, ha de reconocer su valía, y sólo así, dejará de oprimir a los demás.
¡Que buena reflexión, Celia!
ResponderEliminarUn conciso pensamiento se arraiga en los adentros para convertirse en advertencia de cualquier momento, donde es protagonista quien reflexiona y sabe que 'el oso' ante quien osa puede dar su manotazo y dar por terminado todo. Bien se dice que Dios dio los sentidos al ser humano para templar su propia naturaleza ante la imprevisible suya, advirtiéndole. La curiosidad es un desafío y del que arriesga aprendemos. Desafiar esa realidad constituye una fuente de experiencias nuevas para otros si el mal desafía al bien, pero quien lo hace si quedas para contarlo, se siente mejor y poderoso; pero tampoco es este el destino del hombre cuando sabe que de ello depende su vida y hay mucho por hacer en bien de los demás sin desafiar al `oso´ que se lleva dentro. Convertir la existencia en leyenda es advertir el riesgo y salvar vidas o conseguir dar valor a esas otras que conocen los resultados.
Un saludo.
Querida Elisa. Ya no tengo nada que aportar. Tus comentarios siempre son como ese filón sin fin, de donde brotan las palabras.
EliminarGracias, amiga. Besos
Reconocer la vaía como "Ser Humano", esa es la clave y también ver toda la dimensión de la vida.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz tarde.
Efectivamente, Rafael. Comenzando por nosotros mismos, y abarcando al Mundo entero.
Eliminar¿Una utopía? Tal vez, pero ¿quien dijo que las utopías no pueden ser realidad?
Un abrazo
Me encantan estas pequeñas perlas...
ResponderEliminarBesos
Excelente y sabia reflexión Celia.
ResponderEliminarUn abrazo.
Amiga, gracias por tus palabras.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sindel.
ResponderEliminarMuchas gracias por dedicar un tiempo a estar lecturas, de una mañana lluviosa. Eso ha sido ayer. Pero hoy... hoy ya es otro día.
Besinos