La Perla de la Unión. Un Simbolismo Universal.

La Perla de la Unión. Un Simbolismo Universal.
La "PERLA DE LA UNIÓN". Si todos aunáramos Creencia, en un Ser Único, sabiéndonos parte de Él mismo, la vida cambiaría.

viernes, 11 de diciembre de 2020

ESPÍRITU Y ALMA, EN LA NATURALEZA

 





Las vivencias establecidas antes de encarnar pueden tornarse también vivencias libres de trazado, por la libertad humana.

Las vivencias establecidas siempre responden a una causa, a una circunstancia a vivir, acomodada a la evolución del Alma.

 

Cuando el Alma encarna en ser humano, no lo hace de manera casual, ya que el Alma, en conjunción Espiritual, elige vivencia a transitar, aunque sea de dureza absoluta, ya que desde la Inmensidad, el paso por la Tierra, es un espacio de tiempo ínfimo, comparado con la Totalidad de las experiencias.

 

El Alma es blanca o gris dependiendo de las vivencias transitadas.

 

Las Almas son cúmulos de Energía, en los que el aprendizaje trazan sus vivencias. Quien vibró en dureza experimentará esa dureza en sí mismo. Quien subió peldaños de trascendencia hacia el Amor, regresará para brindar Amor al caminante de la Vida.

 

El Alma puede ser enorme, Amorosa, sabia, infinita presencia desde lo inabarcable, o puede ser dura, pétrea, hostil; trazadora junto a la Mente, de los mayores despropósitos en su encarnación.

 

El Alma es moldeable a las manifestaciones de la razón mental.

 

La mente encarnada lleva su conexión con la parte espiritual, -Espíritu-Alma-, y juntos pueden elevar sus percepciones y sentimientos o aquietarse en la más absoluta oscuridad.

 

El Alma, -prolegómeno del Espíritu, que siendo en lo Eterno-, se interpreta Alma, para transitar y vivir a través del humano.

 

El Alma es un Todo en sí misma, ya que tiene la capacidad de crear, de expandir, de involucrarse en grandes retos.

 

El Alma no es mortal, porque nunca ha nacido, y en sí misma lleva diversos colores en sus manifestaciones.

 

El Alma Es en todo viviente y en cada cual se adapta a sus experiencias: los animales, las vegetaciones, las manifestaciones aire-fuego, todo responde al Alma Universal.

 

El Alma es ese gran Paraguas, con su tela, sus varillas, su empuñadura, como también es el Ser que lo contiene.

 

El Alma es de colores brillantes u opacos. Es hacedora de misterios y realizaciones espirituales.

 

El Alma encarnada va capitaneada por la razón y por ello, el Alma sigue los dictados del bien-mal, dependiendo de los pensamientos cuando forman parte de la razón oscurecida o Luminosa.

 

El Alma es pura cuando se interpreta Naturaleza y reparte instinto, y Vida, y Creación.

 

Porque el Alma es bella y armoniosa cuando vive  vibrando  en  Creación y Luz eterna.  Pero el Alma... es solo timonel, cuando la dirige la Mente.

Celia Álvarez Fresno 11-12-2020